En 1973, a causa de las obras de restauración de la Parroquia, se celebró el besamanos de la Santísima Virgen de los Dolores en el trascoro de la iglesia, delante del altar de la Carbonera, donde se también se ofició la Solemne Función de los Dolores Gloriosos, a la que asistieron los fieles desde la Plaza de Jesús Nazareno.