Las primeras fotos en color del paso de la Santísima Virgen se tomaron en 1973, año en que se estrenó el pasado del manto antiguo a nuevo terciopelo, realizado en los talleres de Rincón Galicia, que le añadió algunas piezas de aplicación.
A mediados de los ochenta, la familia Delgado Pérez cedió durante varios años el corralón de su propiedad frente al Pozo Nuevo para la celebración de una verbena popular, coincidiendo con el Besamanos de la Stma. Virgen, con actuaciones de artistas y grupos famosos como el Ballet de Pepe Moreno.
En 1973, a causa de las obras de restauración de la Parroquia, se celebró el besamanos de la Santísima Virgen de los Dolores en el trascoro de la iglesia, delante del altar de la Carbonera, donde se también se ofició la Solemne Función de los Dolores Gloriosos, a la que asistieron los fieles desde la Plaza de Jesús Nazareno.
En 1974 y 1979 llovió el Viernes Santo. La Junta de Gobierno de entonces decidió hacer de forma extraordinaria la Estación de Penitencia el Sábado Santo, saliendo a las cuatro de la tarde con el fin de estar de regreso en el templo antes de la celebración de la Vigilia Pascual.
Debido a las dificultades económicas de la época, a mediados del siglo pasado, el monte de corcho del paso del Señor se adornaba sólo con claveles artificiales a los que el recordado Pedro Delgado (q.e.p.d.) ponía unas gotas de «esencia de clavel» para que parecieran naturales.
Desde mediados de los ochenta, el grupo joven de la Hermandad organizaba una tómbola benéfica durante la Feria de Agosto. Desde primeros de julio recorrían el pueblo con una furgoneta recogiendo los regalos que luego numeraban y organizaban en lotes para cada día de Feria.