La Hermandad de los canónigos

La presencia de canónigos y el protagonismo de los eclesiásticos en la primera etapa histórica de la Hermandad, ocasionaba algunos problemas con los laicos, que consideraban «que todo debía andar desarreglado» por estar gobernada por clérigos.

 

El olivar de la Virgen

El Abad Poblaciones Dávalos, que sentía una especial devoción por Nª Sra. de los Dolores, a la que llamaba «mi madre», destinó en sus testamento que con el producto de la explotación de sus bienes inmuebles y de una finca de olivar se sufragase en adelante el culto a la Virgen.

 

Las Reglas de la Soledad de San Lorenzo

En el archivo parroquial se conserva una copia, realizada hacia 1712, de las terceras reglas de la Soledad de San Lorenzo, que seguramente sirvió a los fundadores de nuestra Hermandad para tomar como modelo el espíritu que subyacía en aquellos estatutos y recoger de ellos algunos elementos fundamentales.

 

Traje de torero

En el museo de la casa-Hermandad se conserva un traje de torero, bordado en plata sobre raso de color blanco, que fue donado en 1973 a la Santísima Virgen por el diestro Palomo Linares, con el fin de confeccionarle una saya, aunque nunca llegó a realizarse.

 

Privilegio pontificio

El 28 de abril de 1727 el Papa Benedicto XIII otorgó un privilegio al Altar de Nª Sra. de los Dolores mediante el cual se concedía Indulgencia al Hermano o Hermana por cuya alma se dijera misa en dicho Altar, es decir, se «sacaba su alma del Purgatorio».

El sermón del Descendimiento

En el sermón del Descendimiento del Viernes Santo, mientras el predicador glosaba los sufrimientos y humillaciones que Cristo pasó por la Salvación del género humano, la Imagen articulada que posteriormente recorrería las calles del pueblo en la urna de Cristal durante el Santo Entierro era bajada de la cruz por hombres revestidos de Santos Varones y Evangelistas.